Sabemos que con el calor y las vacaciones se relajan las rutinas, y lo que era antes algo esencial —como el deporte, o la dieta, o la higiene dental— se deja ir un poquito. Sin embargo, con intención de ayudarte a continuar protegiendo tu boca de la caries en verano, te dejamos aquí tres consejos fáciles de recordar, prácticos y rápidos.
El agua no es para los peces
Todos hemos tenido una inmensa carta de bebidas en las manos. Desde smoothies sanos hasta la sangría más fresquita, pasando por el clásico y chispeante refresco de cola o ese gin-tonic tan, tan goloso, la oferta es infinita, tentadora y muy difícil de rechazar.
Sin embargo, nada te refrescará ni calmará la sed tanto como un buen vaso de agua fría.
Siendo realistas, sé que vas a beber otras cosas —pensar lo contrario sería suponer demasiado— pero asegúrate de beber al menos un sorbo de agua cuando termines la otra bebida para ayudar a la saliva a restablecer el pH neutro de tu boca.
Cuando notas un sabor ácido en tu boca tras terminarte el café o el zumo, eso sucede porque los restos que quedan en boca comienzan a degradarse. Son esos restos los que pueden causar problemas para tu salud bucal.
Termina rápido tus bebidas y tus alimentos dulces
Otro factor especialmente importante en la prevención de la caries en verano es el tiempo de exposición a los alimentos que la causan. Tus dientes no sufren lo mismo si te tomas un zumo sorbo a sorbo durante una tarde entera que si te lo tomas en diez minutos, te bebes un vaso de agua y no expones tus dientes a otro dulce en lo que resta de tarde. La diferencia está en el tiempo en el que tus dientes están expuestos a ácidos y que imposibilitas el papel amortiguador del pH que posee la saliva humana de manera natural. Mientras que en el segundo caso se restablece un pH favorable al terminar de forma rápida, en el primero maceras tus dientes en ácido porque estás toda la tarde bebiendo, causando bajas de pH con cada sorbo ingerido.
Ten a mano un cepillo de dientes para los viajes
Es fácil conseguir cepillos de dientes y pastas dentífricas pequeñas de alta calidad que puedas llevar contigo. Te recomiendo encarecidamente que los lleves encima. Es un pequeño sacrificio, y tus dientes lo agradecerán sobremanera.
Visita a tu dentista antes de las vacaciones
Si todavía no has ido este año, asegúrate de visitar a tu dentista antes de empezar las vacaciones para hacerte una buena revisión y limpieza y comprobar que todo esté bien.
Y tú, ¿qué haces para cuidar tus dientes en verano?
